Videoconferencia y patrimonio europeo
Martes 8 de mayo: cuatro y cuarenta y cinco de la tarde. Casa de la profe, Senigallia, laboratorio de informática, Zaragoza. En los dos lugares los ordenadores están encendido a la espera de que lleguen los primeros alumnos. Todos están que trinan. Mientras se van presentando otra vez y explicando lo que estudian y como es su escuela, la voz se corta. Se nota la emoción a flor de piel.
Después de romper el hielo, los alumnos se desafían: Fran nos ha preparado un kahoot con 22 preguntas sobre aspectos culturales de España e Italia. Sobra decir que han ganado las ganas de conocerse a pesar de la distancia.
En la última parte de la sesión estuvimos hablando sobre el producto colaborativo final de nuestro proyecto, "El rosco de las emociones" y nos comprometimos a grabar algún vídeo con contenido musical.
Acabado el encuentro, todos han salido muy satisfechos. El proyecto se acerca al final. Todos van a ponerse las pilas esperando tener la posibilidad de encontrarse pronto en persona. No importa si allí o aquí, lo importante será conseguirlo.
